Internacionalización: una potente y patente invitación para la educación superior chilena
octubre 16, 2023
Columnas AEQUALIS. 022. Octubre 2023

Claudia Navarro Papic,
Co-Fundadora y Directora de Internacionalización,
PROA Consulting

Esta semana despertamos a un mundo que está viviendo dos guerras tremendamente violentas en paralelo, un continente africano que ha tenido 9 golpes de estado exitosos en los últimos 2 años y medio, y una economía global que se ve afectada por casi cada vaivén que ocurre en cualquier parte del mundo. Un ejemplo de ello es el impacto que tienen índices económicos tan disímiles como el precio del petróleo y de las energías, las tasas de interés bancarias, la volatilidad de monedas como el dólar, euro, yuan, y de las acciones de empresas globales, así como, movilizaciones políticas, huelgas en industrias como la automotriz y de salud, en las economías de países independiente de sus tamaños o ubicación.

Hoy día más que nunca se hace patente la urgencia de educar «ciudadanos globales» capaces de incorporar en su quehacer personal y profesional una comprensión local, global y multicultural de su entorno, comunicándose efectivamente con personas de diversas culturas, aprendiendo a respetar y aceptar diferentes perspectivas, y a reflexionar y ser proactivo en cuanto al impacto de su actuación en el desarrollo sostenible y el bienestar colectivo, no solo de su entorno inmediato sino del entorno global (The Organization for Economic Cooperation and Development – OECD, 2018).

Ya en el año 2015 las Naciones Unidas reafirmaban su relevancia al incorporar el concepto de ciudadanía global en sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Especialmente el ODS#4 señala la necesidad de “Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos”. En particular, la meta 4.7 de este mismo objetivo propone que de aquí al 2030, aseguremos “…que todos los alumnos adquieran los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para promover el desarrollo sostenible, entre otras cosas mediante la educación para el desarrollo sostenible y los estilos de vida sostenibles, los derechos humanos, la igualdad de género, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y la contribución de la cultura al desarrollo sostenible” (https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/).

¡Qué potente y patente invitación!

En los últimos 35 años la dimensión internacional en la educación superior ha sido asociada a la firma de convenios institucionales o al intercambio académico, oferta de “lujo” y optativa para algunos “elegidos” que pueden, y tienen los medios para viajar al extranjero por un semestre o un año. Por tanto, su alcance ha sido muy acotado y difícil de evaluar en tanto su impacto a nivel institucional.

Hoy, sin embargo, vemos cómo la dimensión educacional de la internacionalización se ha ido ubicando gradualmente en un espacio prioritario estratégico de las agendas de organismos internacionales, gobiernos, y también un número creciente de instituciones de formación. La internacionalización ha evolucionado a ser considerada como un proceso clave al servicio del plan estratégico de las instituciones y, como tal, permeable transversalmente a sus principales pilares de docencia, vinculación con el medio, investigación, entre otros.

Un número importante de universidades y algunos institutos profesionales en Chile están mostrando coherencia en su declaración de la internacionalización como una prioridad institucional y la consecuente implementación de instrumentos de gestión concretos que lo avalan.

Hace unos días Duoc UC realizó el lanzamiento de su primera Estrategia de Internacionalización, la cual tuve el honor de apoyar en su diseño. El proceso de elaboración exigió un trabajo exhaustivo con diferentes actores de esa casa de estudios para identificar las fortalezas, las oportunidades y las necesidades. Duoc UC ha sido pionero en implementar programas de movilidad hacia el extranjero entre sus pares técnico-profesional, sin embargo, los efectos de la pandemia del COVID-19 y una reestructuración institucional impulsaron este gran paso de planificar los objetivos estratégicos y las acciones concretas que le ayudarán a implementar este Plan de Acción en un tiempo acotado y de forma pertinente a las demandas del mercado global del trabajo, el desarrollo sostenible y el bienestar colectivo.

A través del impulso de la planificación estratégica y el diseño de hojas de ruta, estas instituciones están respondiendo a esta potente y patente invitación. De esta manera, están promoviendo la formación de una comunidad de ciudadanos globales con una visión multicultural, contribuyendo al desarrollo profesional integral de sus estudiantes para asumir los desafíos de la industria global y sus necesidades emergentes. Son instituciones que, al proyectarse con una visión estratégica más allá del medio local, introducen y habilitan a sus comunidades académicas a participar de un espacio altamente globalizado, sin límites físicos, interconectado y diverso.