Consideraciones para formular y evaluar la función vinculación con el medio
diciembre 05, 2023
Columnas AEQUALIS. 028. Diciembre 2023

Juan Music Tomicic, Académico Departamento Ingeniería Civil, Universidad Católica del Norte y Director de AEQUALIS.
Andrés Music Cáceres, Psicólogo y Asesor Organizacional.

En octubre de este año entró en vigor la nueva acreditación institucional integral para las instituciones de educación superior, la cual considera dimensiones de acreditación con sus respectivos criterios y estándares de evaluación. Una de estas dimensiones corresponde a la vinculación con el Medio (VcM). En el presente artículo se exponen los aspectos esenciales a considerar para formular y evaluar la función vinculación con el medio y la importancia de tener bien formulados sus programas, lo que se logra eligiendo una adecuada metodología para su elaboración. Con esto se permitirá una adecuada implementación, seguimiento y evaluación de sus resultados, contribuciones e impactos. Todo lo anterior entrega herramientas para facilitar la gestión de esta función misional, mejorar su pertinencia, eficacia, eficiencia y calidad, contribuyendo a su mejora continua y fortaleciendo la capacidad de autorregulación. De esta forma, le permitirá a la institución poder cumplir con su misión, propósitos y objetivos de esta función misional, así como también con los criterios y estándares de esta dimensión de acreditación.

Realidad de la acreditación de la función vinculación con el medio

La realidad actual de la acreditación de la función de vinculación con el medio es:

  • Situación de acreditación: de las 58 Universidades, 7 no están acreditadas en VcM. En el caso de los Institutos Profesionales (IP) de los 32 existentes, 3 están acreditados en VcM. De los 50 CFT 3 están acreditados en dicha función. Finalmente, de las 19 Instituciones de las Fuerzas Armadas, de Orden y Seguridad, 7 están acreditadas en VcM.

Conclusión: de las 159 instituciones de educación superior 56 están acreditadas en VcM, es decir, 35,22%. Luego, hay 103 instituciones no acreditadas en VcM, es decir, 64,78%.

  • Explicitación de esta función en la misión y visión: al leer las misiones de las instituciones de educación superior, en especial en los casos de IP y CFT, se observa que un conjunto de ellos no tiene claramente explicitada dicha función en su misión.
  • Principal debilidad detectada en acreditaciones: al analizar los dictámenes de la CNA, el aspecto que más se observa en esta función misional es el incipiente nivel de medición de impactos internos (es decir, en las otras funciones misionales) e impactos externos en el público objetivo definido por la institución (stakeholders).

 

Condiciones para una adecuada formulación de la función vinculación con el medio

Para tener adecuadamente formulada esta función misional, se requiere contar con una política de VcM que explicite sus propósitos y objetivos, así como también un modelo de vinculación con el medio que sea coherente con la misión, valores y propósitos institucionales. Respecto del modelo se espera que: tenga expresados los ámbitos de vinculación que son de interés institucional, con sus instrumentos de vinculación (programas y proyectos); explicite los impactos internos que se busca en las otras funciones misionales; identifique su público externo relevante (stakeholders) y los impactos externos que se quiere lograr en ellos. Finalmente, se requiere elaborar las matrices de tributación, interna, externa y de grupos de interés, las cuales muestran para cada programa a qué impacto interno, externo y stakeholders está dirigido (Music, J. y Venegas, J. 2020).

Evaluación de la función de vinculación con el medio

Es posible distinguir 2 tipos de evaluaciones: una a nivel institucional, la cual está enfocada en el compromiso institucional con la función vinculación con el medio (Holand, B. 1997; Gelmon, S. et al. 2005) y otra a nivel de programas y proyectos. Respecto a esta última, es importante distinguir entre resultados, contribuciones e impactos. Los resultados suelen ser productos tangibles y relativamente fáciles de obtener; las contribuciones corresponden a los cambios que se observan en la población objetivo producto de la ejecución de un proyecto, pero que no son atribuibles únicamente a éste, pudiendo estar afectados por otros factores; por último, los impactos corresponden a los cambios que se observan en la población objetivo, posterior a la ejecución de un programa, por lo tanto requiere del establecimiento de un contrafactual para dar cuenta que los efectos del programa se deben exclusivamente a su implementación. Es importante señalar, que, para efecto de la aplicación de los criterios y estándares, la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) ha decidido utilizar el concepto de contribución para flexibilizar el concepto de impacto.

Para poder evaluar programas y proyectos es fundamental adoptar un enfoque o método adecuado en su formulación. En este caso, se sugiere utilizar la Metodología del Marco Lógico (MML) (Ortegón, E., Pacheco, J.F. y Prieto, A., (2005). Esta es una herramienta que facilita el proceso de conceptualización, diseño, ejecución y evaluación, tanto de programas como de proyectos. Su énfasis está centrado en la orientación por objetivos, su focalización hacia los grupos beneficiarios y el favorecimiento de la participación y comunicación entre las partes interesadas. Al adoptar esta metodología, u otra, es importante que cada programa que implemente la Institución lo formule mediante dicha herramienta.

Respecto a la MML, sus principales etapas son:

  1. Identificación del problema y alternativa de solución, la cual comprende los siguientes elementos: Análisis de involucrados, análisis del problema, análisis de objetivos, identificación de alternativas de solución al problema, selección de alternativa óptima y estructura analítica del programa o proyecto.
  2. Matriz de (planificación) de marco lógico, conformada por los siguientes elementos: resumen narrativo de objetivos, indicadores, medios de verificación y supuestos. Por medio de ésta se señala aquello que se busca lograr con el programa y los indicadores de resultados, contribución e impactos comprometidos y que deben ser evaluados. Dicha matriz contiene como filas: Fin, Propósitos, Componentes y Actividades del programa; y como columnas: Resumen narrativo, Indicadores comprometidos, Medios de verificación y Supuestos. El Fin del programa o proyecto son las contribuciones o impactos internos y externos comprometidos, es decir, los efectos del programa; los Propósitos son los resultados a lograr, midiendo la eficacia del programa; los Componentes son los productos por lograr, es decir da cuenta de la eficiencia; y las Actividades permiten verificar la gestión de los procesos del programa.
  • Técnicas para medir resultados.

Por lo tanto, la principal conclusión es que para evaluar un programa o proyecto es requisito previo tenerlo bien formulado. En este sentido, el método de marco lógico contribuye a ello.

Modelos para evaluar contribuciones e impactos

Para la evaluación de impactos, se cuenta con modelos experimentales y cuasi experimentales. En los primeros, los miembros de los grupos, con y sin proyecto, se seleccionan aleatoriamente; en el caso de los segundos, los grupos ya están conformados de antemano. A modo de ejemplo, en los métodos experimentales podemos encontrar el ensayo aleatorio controlado; en los cuasi experimentales tenemos los métodos de diferencias simple, diferencias en diferencias y regresión discontinua. Por otra parte, para la evaluación de contribuciones, están los modelos no experimentales, en éstos la población objetivo no puede ser comparada con un grupo testigo. Ejemplo de éste es el método pre – post, el cual evalúa al grupo antes y después de ser intervenido.

Referencias

  • Music, J. y Venegas, J. 2020. Vinculación con el Medio: Ampliando la mirada.
  • Fundación AEQUALIS. https://aequalis.cl/vinculacion-con-el-medio-ampliando-la-mirada/
  • Ortegón, E., Pacheco, J.F. y Prieto, A., (2005). Metodología del marco lógico para la planificación, el seguimiento y la evaluación de proyectos y programas. Naciones Unidas. CEPAL. Santiago, Chile.
  • Gelmon, S. et al. 2005. Building capacity for community engagement: Institutional self – assessment.
  • Holand, B. 1997. Analyzing Institutional Commitment to Service: A Model of Key Organizational Factors. Michigan Journal of Community Service Learning. Fall, pp30-41.